Los escritores deberíamos estar preocupados por una sola cosa: escribir. Eso es cierto. Sin embargo, el escritor emprendedor tiene que preocuparse de otros aspectos de su carrera. Su blog, el lanzamiento de un libro, la promoción de sus novelas, la lista de correo… ¿Te agobias cuando arrancas un proyecto nuevo? ¿Te cuesta marcar objetivos y cuando terminas no sabes si los has cumplido? Suele pasar mucho y la solución son los objetivos SMART.

Esto no es ningún truco de magia. No vamos a sacrificar a nadie, ni usaremos polvitos micus-mecus. Los objetivos SMART son una herramienta de marketing diseñada para tener una estructura y una guía que te ayude a avanzar en tu proyecto. Con estos objetivos será más sencillo identificar qué quieres y cómo puedes conseguirlo.

Es un método que funciona. Que se utiliza en todas partes y que mejora la eficacía de cualquier acción de marketing y de cualquier lanzamiento o promoción de productos y servicios.

¿Qué son los objetivos SMART y cómo pueden ayudarme a ser escritor?

Los objetivos SMART son una idea bastante moderna. Los creó en 1981 un tal George T. Doran, un consultor de marketing y directo de planificación de la Washington Water Power Company. La idea fue publicada en folletín interno llamado There’s a S.M.A.R.T Way To Write Management’s Goals and Objetctives.

En ese documento introdujo los objetivos SMART como una herramienta para mejorar los criterios de creación de objetivos y mejorar los resultados de sus empleados.

¿Cómo lo hacemos? Muy sencillo, debes seguir la siguiente estructura, marcada por las letras del acrónimo SMART:

S-Specific. Objetivos específicos

Cuando escribas tu objetivo sé específico con lo que quieres lograr. Piensa que esa es tu misión, como si fuera un juego de guerra, cuando empiezas cada misión aparecen en pantalla tus objetivos específicos.

No se trata de hacer una lista detallada de cómo vas lograr alcanzar tu objetivo. Si no tienes muy claro cómo enfocar esta parte, usa las famosas «W» del periodismo.

  • ¿Quién? (who): ¿Vas a hacerlo todo tú solo o vas a necesitar más gente en el proyecto?
  • ¿Qué? (what): Piensa en qué quieres lograr exactamente. No tengas miedo de los detalles en este punto, sé lo más específico posible.
  • ¿Cuando? (when): Entraremos en detalles más adelante sobre este punto. De momento simplemente ponte un límite de tiempo.
  • ¿Dónde? (where): Esta es una pregunta más importante de lo que crees. El lugar es importante, pues tendrás que tener muy claro qué canales usarás. ¿Vas a utilizar tu blog de escritor? ¿Tu lista de correo? ¿Te vas a centrar en las redes sociales? Recuerda, sé específico, si piensas usar las redes sociales, señala qué redes usarás.
  • ¿Cuál? (which): Apunta cualquier obstáculo o necesidad que se pueda presentar. Este es un paso importante, pues determinará si tu objetivo es realista o no. Por ejemplo, si tu objetivo es publicar un curso de SEO para escritores y no tienes ni idea de SEO, a lo mejor estás mordiendo más de lo que puedes masticar. Como resultado, puede que tengas que redefinir tu proyecto y aprender SEO en lugar de enseñar SEO.
  • ¿Por qué? (why): ¿Por qué lo haces? Lo más seguro es que lo hagas porque necesitas ingresos, es importante saber por qué haces lo que haces. Tienes que ser completamente sincero.

M-Measurable. Objetivos medibles

Este es uno de los puntos en los que suele fallar mucha gente. No saben qué o cómo medir los objetivos y, al final, meten la pata.

Antes de comenzar debes saber qué métricas son las importantes para alcanzar tu objetivo. Si te acabas de establecer, acabas de crear tu blog y das tus primeros pasos, una métrica importante —aunque no sirva de nada— serán las visitas. Al principio las métricas de vanidad importan.

Si sabes qué métricas utilizar sabrás si estás avanzando en tu proyecto. Si tu proyecto es a largo plazo, si vas a estar varios meses trabajando en él, entonces debes marcarte algunos hitos en el camino. De esta forma sabrás que no te has desviado y que estás recorriendo el camino correcto.

Objetivos SMART para escritores

A-Achievable. Objetivos alcanzables

Cuando trabajo en promociones de libros con algunos escritores, tienen objetivos poco realistas. Un ejemplo muy común, es el de escritores noveles que quieren vender 100 libros en la primera semana o 1000 libros en un mes.

Es importante que los objetivos sean razonables y alcanzables. Un objetivo imposible de alcanzar traerá frustración. Seguramente lograrás vender 1000 ejemplares, pero eso requerirá mucho más tiempo, más inversión y más conocimientos.

El objetivo te tiene que inspirar, si te desmotiva, si parece inalcanzable, entonces echará a perder todo el trabajo. Piensa si tienes todas las herramientas y conocimientos necesarios o si vas a tenerlas en el futuro. Si no las tienes, anota cómo vas a conseguirlas y cuanto te costará hacerlo.

R-Relevant. Objetivos importantes

Importante significa que te hará avanzar en tu carrera. Por ejemplo, yo soy copywriter y escritor de terror. Escribir y publicar un libro de romántica o un curso sobre cómo escribir romántica, no es un objetivo importante en mi carrera, es más, ni siquiera me plantearía hacer algo así. Tus objetivos deben ir en línea con lo que haces.

Y pasa lo mismo con los productos y servicios. Yo soy copywriter y especialista en SEO, lanzar un curso de programación no me sirve de nada, pues mis lectores no me conocen como programador. Sin embargo, un taller de escritura de terror sí sería un objetivo importante en mi carrera.

T-Time-Bound. Objetivos con plazo fijo

Cualquiera puede crear objetivos, pero si el tiempo que te pones no es realista, lo más seguro es que fracases. Necesitas establecer unos tiempos. Estudia cada fase del proyecto, piensa en cuánto tiempo te va a llevar cada una de ellas y, con esa información, establece límites de tiempo.

Escribir una novela en dos semanas, será casi imposible. Corregirla y editarla en otras dos semanas, tampoco es muy realista. Empezar tu blog de escritor un mes antes del lanzamiento, tampoco es realista. Como dice Seth Godin, el mejor momento para comenzar a promocionar tu libro es 3 años antes de su lanzamiento.

Escribir una novela en una estación —3 o 4 meses, como hace Stephen King— sí es un límite de tiempo más realista. Dejar 2 o 3 semanas de espacio antes de revisarla y corregirla, también. Tomarte 2 o 3 semanas más para la edición también. Dejar un mes de tiempo a tus lectores cero, es casi ideal. Y abrirte un blog de escritor un año antes de lanzar tu novela, será la mejor idea que tengas.

La forma más sencilla de escribir objetivos SMART

Escribir objetivos SMART es más exigente de lo que piensas. Requiere que contestes muchas preguntas. Cada una de las respuestas te ayudará a refinar la estrategia, asegurándote de que los objetivos son alcanzables.

Recuerda que tienes que ser realista, pero sin dejar de ser optimista. Al fin y al cabo, es un proyecto y tienes que tener ilusión.

Escribir objetivos SMART no tiene que ser una pesadilla, ni un proceso complejo. De hecho debe ser divertido, es una forma de aprender más sobre tu proyecto y sobre lo que esperas en realidad de él.

Os voy a poner dos ejemplos comunes de objetivos iniciales, con ellos os enseñaré cómo desarrollar vuestros propios objetivos SMART:

  • Quiero completar un proyecto.
  • Quiero mejorar mis habilidades.

Estos dos objetivos son los que más me encuentro entre los escritores —ojo, y entre la mayoría de empresas con las que he trabajado—. Como puedes ver, los dos objetivos son poco específicos, de hecho son bastante vagos.

Ahora vamos a ver cómo convertir esos dos objetivos en objetivos SMART.

Objetivo 1: Quiero completar un proyecto

  • Específico: Muchos de mis lectores acceden a mi página desde sus móviles. Mi página no es responsive y pierdo muchos lectores. Quiero cambiar mi página, para eso necesito un diseñador y un copywriter.
  • Medible: Quiero ver cómo baja mi tasa de rebote y cómo aumentan las visitas desde móviles y tablets. Tengo que bajar la tasa de rebote a un 65% y quiero aumentar los visitantes recurrentes en un 12%.
  • Alcanzable: Ya tengo al desarrollador y al copywriter. Tengo mis objetivos medibles, ahora tengo que descomponer esos objetivos en hitos. Por ejemplo: bajar la tasa de rebote de 85% a 80% en dos meses.
  • Importante: Mejorar la experiencia de los lectores en mi página es mi principal objetivo para este año.
  • Plazo: Tengo un año —de septiembre a septiembre— para mejorar la experiencia del usuario y alcanzar los objetivos marcados en «medible».

Objetivo 2: Quiero mejorar mis habilidades

  • Específico: No soy muy bueno con el SEO. Quiero mejorar el posicionamiento de mi blog de escritor y para eso necesito aprender a buscar mejores palabras clave y gestionar mejor las categorías, las etiquetas y el SEO de mi página.
  • Medible: Para la semana que viene debería haber encontrado un curso o taller de SEO interesante. Para dentro de seis meses, debería saber cómo gestionar el SEO de mi página de autor.
  • Alcanzable: mejorar mis conocimientos de SEO es importante para posicionarme en Google sin necesidad de gastar dinero extra en copywriters y SEOs. Puedo reservar una o dos horas cada día para el curso y para encontrar guías en Google.
  • Importante: El SEO es una de las partes más importantes de mi blog de escritor. Además, saber cómo encontrar las palabras clave adecuadas, me puede ayudar a posicionar mi próximo libro en Amazon.
  • Plazo: En ocho meses tengo que ser capaz de comprender el SEO. No necesito entender los conceptos más complejos ni avanzados.

Una vez hayas atravesado todo el proceso, punto por punto, puedes escribir un objetivo SMART completo.

Objetivo SMART: Quiero completar un proyecto

  • Descripción: Quiero mejorar la experiencia de usuario de mis lectores en mi página, así que voy a cambiarla. En un año de plazo tengo que rebajar la tasa de rebote a un 65% y mejorar los visitantes recurrentes en un 12%. Para construir mi nueva página contaré con un desarrollador y un copywriter que se ocupe de los textos.
  • Hito: En dos meses lanzar la nueva página. Desde el lanzamiento, en dos meses bajar la tasa de rebote de 85% a 80%.
  • Plazo: Un año.

Objetivo SMART: Quiero mejorar una habilidad

  • Descripción: para mejorar mi visibilidad en Internet, quiero mejorar mis habilidades en SEO. Tomaré clases, veré tutoriales en Youtube y leeré guías en Google.
  • Hito: completar un taller SEO en seis meses.
  • Plazo: Ocho meses.

Establecer el punto de éxito y de fracaso

Las cosas son como son y vienen como vienen —vaya ful de frase que me acabo de marcar, ¿eh?—. Muchas veces fracasarás, incluso siguiendo cada uno de los pasos, ya que pueden pasar muchas y puede ser que no consigas alcanzar tus objetivos.

No pasa nada.

Como todo en el marketing, los objetivos SMART pueden ir cambiando a medida que avanzas en la resolución del proyecto. Puede que de repente te encuentres con un objetivo mejor —SMARTER, que sería el resultado de añadir Evaluate y Re-Do, a tus objetivos—. La idea detrás de esto es que no dejes de evaluar tus objetivos y reescribirlos siempre que sea necesario.

Los objetivos no están escritos en piedra, por lo que puede que tengas que cambiar cosas. Nunca los dejes en un cajón olvidados. Una estrategia de contenidos, un plan de medios, unos objetivos SMART todos son documentos vivos, que van cambiando a medida que avanza el proyecto.

Tienes que revisar y adaptar. Aquí viene otro punto importante: tienes que tener muy claro cuando triunfas y cuando fracasas. Si has fallado en algún punto, tienes que ser capaz de identificar, no solo cuando, sino también por qué. Conocer tus fallos, reconocer el fracaso, es importante para escribir esos objetivo SMARTER.

Escribe tus objetivos SMART

Ya lo ves, no es tan complicado. Muchos escritores se lanzan a la piscina sin tener claro qué quieren hacer y cómo tienen pensado hacerlo. Ahí es donde suelen fallar y cuando lo hacen, no saben qué ha fallado.

Con esta herramienta tan sencilla tendrás un camino de baldosas amarillas para que no te pierdas y alcanzar tus objetivos como escritor.

Cuéntame, ¿sueles planificar tus proyectos? ¿Tienes objetivos SMART? ¿Los conocías, los has usado alguna vez?